La fisioterapia es una especialidad médica que ha transformado la vida de millones de personas alrededor del mundo. A menudo, cuando escuchamos el término "fisioterapia", lo relacionamos con rehabilitación después de una lesión. Sin embargo, su alcance y beneficios son mucho más amplios y profundos.
La fisioterapia es una disciplina de la salud que se enfoca en la prevención, evaluación y tratamiento de lesiones y enfermedades mediante técnicas manuales, ejercicios terapéuticos y modalidades físicas como el calor, el frío y la electricidad. Su principal objetivo es promover, mantener y restaurar el movimiento y la función física, mejorando así la calidad de vida de los pacientes.
Las enfermedades que trata la fisioterapia y que son las más comunes integran el área traumatológica, es decir, lesiones traumáticas de columna y extremidades que afectan a huesos, ligamentos y articulaciones, músculos y tendones.
El objetivo de la fisioterapia es aliviar dolencias, disminuir la inflamación, recuperar y regenerar la movilidad de la zona afectada, entre otros. En este sentido, algunas de las patologías que integran este grupo y que se pueden tratar son: esguinces, luxaciones, fracturas, lumbalgias, rotura de ligamentos, tendones, meniscos, artrosis y más.
Dependiendo de qué o cuáles lesiones se deben tratar, las terapias podrán emplear agentes de calor y frío, terapia manual o física. Para algunos casos, también se recurre al estiramiento y otros ejercicios que faciliten la disminución de la inflamación.
Para esta clase de enfermedades se aplica la fisioterapia deportiva tanto en atletas amateurs como profesionales. Al igual que en el caso anterior, el objetivo es prevenir, curar y acelerar la recuperación de la lesión.
La fisioterapia deportiva trata lesiones musculares como contracturas o contusiones; lesiones en los ligamentos como esguinces o luxaciones; lesiones de tendones; lesiones articulares como artrosis; o lesiones óseas como fracturas y rehabilitación postquirúrgicas.
Algunos de los tratamientos habituales para estas enfermedades son la terapia manual, drenaje linfático, estiramientos, vendaje funcional, entre otros.
Entre las enfermedades que se curan con fisioterapia también destacan las de tipo reumatológica, que se caracterizan por dolor constante, rigidez de las extremidades y degeneración de los tejidos de forma acelerada.
Entre las enfermedades reumatológicas más comunes se pueden mencionar la artritis y la artrosis, cuyo efecto es debilitar el miembro, degeneración muscular, ósea, articulares y en tendones. Pero además de estas, también se pueden tratar otras enfermedades como la tendinitis, la osteoporosis, la artritis reumatoide y la fibromialgia, entre otras.
Los enfoques terapéuticos se centran en las alteraciones que afectan al sistema nervioso y que, por tanto, afectan a la movilidad del individuo.
El objetivo de la fisioterapia en estos casos es lograr una rehabilitación óptima del sistema nervioso, potenciar la capacidad motora y evitar la progresión o empeoramiento de la enfermedad. Entre las afecciones que pueden ser tratadas con fisioterapia se incluyen: infartos cerebrales, lesiones en la cabeza, enfermedad de Parkinson, esclerosis múltiple, parálisis del rostro y Alzheimer.
Cada terapia fisioterapéutica destinada a estas enfermedades busca reducir o eliminar cualquier daño presente en el sistema nervioso central.
La fisioterapia también tiene innumerables beneficios en el área geriátrica, especialmente para prevenir, tratar y mejorar la calidad de vida de pacientes de avanzada edad. Las enfermedades que afectan a estos pacientes son, sobre todo, de tipo degenerativas causadas por la edad, y se pueden prevenir.
Entre las afecciones más comunes destacan dificultad de movimiento, dolores, pérdida del equilibrio y disminución de las funciones articulares.
En estos casos, la fisioterapia ayuda a mejorar el equilibrio y la coordinación de los movimientos, aumentan la independencia de las personas, ganando flexibilidad y fuerza en los músculos.
Un fisioterapeuta es un profesional de la salud altamente capacitado y cualificado para tratar una variedad de condiciones y patologías.
La función principal de un fisioterapeuta es evaluar, diagnosticar y tratar las condiciones musculoesqueléticas y neurológicas que afectan el movimiento y la función del cuerpo. Además de proporcionar tratamiento directo, los fisioterapeutas también desempeñan un papel crucial en la educación y orientación de los pacientes, enseñándoles técnicas de autocuidado, prevención de lesiones y manejo del dolor.
Algunas de las áreas en las que un fisioterapeuta puede intervenir incluyen:
Como puedes ver, la fisioterapia es una disciplina integral y multidisciplinaria que desempeña un papel fundamental en la promoción y restauración de la salud física. Desde la rehabilitación postoperatoria hasta el manejo del dolor crónico, los beneficios de la fisioterapia son innumerables. Como parte integral del equipo de atención médica, los fisioterapeutas desempeñan un papel vital en la mejora de la calidad de vida de los pacientes y en la promoción de un estilo de vida activo y saludable.
¿Necesitas de la ayuda de un fisioterapeuta profesional? En Altare estaremos encantados de ayudarte.